1.7.06
Desperté una mañana
Desperté una mañana sintiendo que no sería un día como cualquier otro, algo en el aire respiraba sueños imposibles de narrar. Sólo sabía que la vida me estaba diciendo algo al oído, un secreto compartido en lenguaje de pájaros que pasaban por sobre los árboles, en la flor que se movía hacia el sol, girando imperceptiblemente en busca de luz y vida.
No olvides, escuchaba, la vida solo es un sueño, nada es real, solo vive cada momento como si fuera el último y así nada te podrá dañar. Maya lo llaman algunos, ilusión de los sentidos, tantas ideas que te parecen propias, tanto sueño y esperanzas por encontrar lo que nunca podrás, pero sigues esperando que la vida te regale al menos una emoción total, con todo lo que eres puesto en ello, con tus ojos abiertos al sol, con tu corazón palpitando en armonía con la madre tierra, con tus pies presurosos de llegar, quien sabe donde, pero eso no importa, solo interesa avanzar, seguir la senda que te ha tocado conocer y hacerla tuya con cada acto que marque tu pulso.
Serás el olvido mañana cuando el sol marche a su morada nocturna, en las sombras, bajo las estrellas, tu voz escucharás en un clamor elevándose al cielo, mientras las campanas sonarán en alegre algarabía, juvenil soñar.
Soy quien soñó tu sueño y al despertar, te contaré de las estelas dejadas en el mar al pasar sobre sus aguas en juegos fantasiosos, al bailar sobre las cúspides de olas blancas de sal, de la mano de sirenas de luz que surgen entre telas sedosas, nubes vaporosas.
No olvides, escuchaba, la vida solo es un sueño, nada es real, solo vive cada momento como si fuera el último y así nada te podrá dañar. Maya lo llaman algunos, ilusión de los sentidos, tantas ideas que te parecen propias, tanto sueño y esperanzas por encontrar lo que nunca podrás, pero sigues esperando que la vida te regale al menos una emoción total, con todo lo que eres puesto en ello, con tus ojos abiertos al sol, con tu corazón palpitando en armonía con la madre tierra, con tus pies presurosos de llegar, quien sabe donde, pero eso no importa, solo interesa avanzar, seguir la senda que te ha tocado conocer y hacerla tuya con cada acto que marque tu pulso.
Serás el olvido mañana cuando el sol marche a su morada nocturna, en las sombras, bajo las estrellas, tu voz escucharás en un clamor elevándose al cielo, mientras las campanas sonarán en alegre algarabía, juvenil soñar.
Soy quien soñó tu sueño y al despertar, te contaré de las estelas dejadas en el mar al pasar sobre sus aguas en juegos fantasiosos, al bailar sobre las cúspides de olas blancas de sal, de la mano de sirenas de luz que surgen entre telas sedosas, nubes vaporosas.
# posted by Carlos @ 12:34 a. m. 
